Decorando la Casa, Módulo 101.

Hace 10 días que nos mudamos oficialmente al nuevo hogar. El cambio de apartamento de dos dormitorios a una casa de más habitaciones es notable. La diferencia está en que hay más espacio para llenar con cosas que todavía no tenemos. Y es aquí donde quiero aplicar mi sentido de economía. Como se sabrá, el país norteamericano donde ahora resido se destaca por su alto nivel de consumo. Si quieres algo o viste algo que te gusta, lo compras. No hay mucho que pensar. La tarjeta de crédito es tu mejor amiga.
He visto ya muchos episodios de "Hoarders", que figurativamente quedé curadita. No es que vaya a terminar en ese estado pero nunca es demasiado pronto para prevenir. Además he visitado muchas casas de conocidos y desde mi punto de vista, se siente un ambiente pesado, oprimido o como que hay una variedad de artilugios que la gente necesita pero no utiliza.
En fin, a mi favor se encuentra mi gusto por lo minimalista. En otras palabras lo bueno, bonito y barato. Y es aquí donde me hallo en mi espacio o en mi zona de comfort. Adoro las "thrift stores" o su debida traducción: tiendas de segunda mano. Aunque me gusta más el término en inglés porque en español suena a sucio, usado o dañado. En estas tiendas se pueden encontrar artículos de toda clase, calidad y variedad. Desde ropa de marca, electrodomésticos, música, libros, muebles, hasta obras de arte que en algunos casos han resultado ser de renombrados artistas y de gran valor.
He sido afortunada en encontrar cosas que he podido reutilizar y me sorprende realmente que la gente se deshaga de prendas o artefactos que se encuentran en excelente condición pero que "pasó de moda". Ya lo dice el dicho "basura de uno, tesoro de otro", o algo así. Pero como lo anoté anteriormente, estoy en la tierra de "si no tienes el último Iphone, no estás en nada". Así que hago uso de estas fuentes para realizar algunos proyectos con la ayuda de Pinterest y sus famosos "DIY projects". Este sitio es adictivo. Te ofrece una infinidad de enlaces que mucha gente visita para -seamos honestos- copiar ideas.
En mi caso, he acumulado un arsenal de tutoriales que me permitirán decorar mi nidito con un presupuesto módico.
Y no me alargo más y voy con lo primero que me pareció fácil, rápido y chic. Gracias a un tutorial que encontré, pude colocar un set de canvas en la pared del dormitorio y el resultado es este:

El material utilizado fue básicamente espuma de poliestireno, tela y plantillas con diferentes figuras. En dicho tutorial, se explica con detalle dónde conseguir y cuánto cuesta cada cosa. Aquí, se puede ver un poco más de cerca:

Repetí este proceso para colgar dos canvas más en el comedor con una tela que encontré en una de estas tiendas. Recorté las figuras que más me gustaron y el resultado es este:

De la misma manera, apliqué otra idea con las cortinas. En sí con ellas no hay vuelta que dar; el material es importante y por lo tanto preferí invertir un poquito más en unas buenas cortinas. En lo que sí compensé para ahorrar fueron en las barras y los soportes que pueden llegar a costar el doble que las mismas cortinas.
Para ello elegí un tutorial donde se puede utilizar tubos de PVC y pelotas de tenis y obtener un resultado para nada decepcionante. Al contrario, se ve estilizado y nadie te lo cree si lo ve.

Para atar cada panel, usé anillos de plástico de los que se usa en las cortinas de baño.

Con este par de proyectos he empezado a explorar un lado mío que no conocía. Y es que ahora con tanta ayuda que ofrece la web, es imposible decir que uno no puede hacer ciertas cosas por falta de habilidad. Solo hay que tener las ganas y paciencia sobre todo. Porque como verán en otra oportunidad, les contaré que cierto tutorial resultó un desastre al que estoy buscando una alternativa para corregir el daño. Así que no se sientan desalentados si tienen una idea y piensan que no es posible realizarla. De alguna manera, siempre se encuentra el camino para lograr nuestros objetivos. Solo hay que querer.